Hay muchas maneras de pasarlo bien y de disfrutar de todos y cada uno de los momentos de ocio de los que podemos disponer. La verdad es que poder hacerlo es una auténtica maravilla porque nos permite vivir cada momento al máximo y podemos sentir gracias a ello que somos felices, lo cual podría decirse que es el objetivo principal en la vida de la gente. No cabe la menor duda de que saber elegir a la perfección cuál es la actividad que nos va a proporcionar mayores dosis de placer es la mejor manera de hacer posible que alcancemos la mayor felicidad.
Hay una manera de disfrutar que en España hemos ido trabajando bien con el paso de los años y que, desde luego, se ha convertido en una tradición absoluta en lo que tiene que ver con nuestra cultura. Hablamos, como seguramente os estéis imaginando, de todo lo que tiene que ver con los disfraces. Es evidente que, cuando llegan Carnaval (ahora que queda cada vez menos para que llegue) y Halloween, hay muchas personas a las que se les ilumina la cara con una sonrisa porque saben que la hora de pasarlo realmente bien se acerca. Y claro, experimentar eso nos gusta a todos.
Una noticia a la que tuvimos acceso gracias a la página web de la agencia de noticias Europa Press informaba de que, en febrero del año 2018, más de un millón de personas disfrutaron en algún momento del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife, que como sabéis es uno de los más grandes de todo el mundo. La verdad es que esto no hace sino poner de manifiesto el hecho de que en España somos muy dados a celebrar por todo lo alto el Carnaval y cualquier tipo de evento que está relacionado directamente con el hecho de disfrazarse.
La mejor prueba de lo que os acabamos de comentar es que también una festividad como la de Halloween se está convirtiendo en característica de nuestro país. A pesar de que es una celebración que se ha puesto de moda principalmente a causa de la influencia de Estados Unidos en prácticamente todo el mundo, lo cierto es que países como España no le han puesto ninguna traba a esta nueva tendencia para que se desarrolle y gane enteros entre la gente. Lo importante es que haya maneras de disfrutar del ocio y lo cierto es que esta es una muy buena.
Hay muchos motivos por los cuales la gente se disfraza. Hemos querido indagar un poco en el asunto para saber por qué la gente decide transformar su identidad y una información vertida en la web de El Español nos daba alguna idea: en lo que tiene que ver con Halloween, lo cierto es que los disfraces no se usan para asustar a nadie, sino por el miedo y el respeto que se les tiene a los muertos. También se hacía para ahuyentar a los espíritus malvados en la Prehistoria. La verdad es que, como veis, el origen de estas tradiciones nunca tiene por qué ser el que nos esperamos.
¿Qué implica todo esto a nivel publicitario?
Con la llegada de las redes sociales y las nuevas tecnologías, la necesidad de ir un paso más allá en lo que tiene que ver con la publicidad es realmente grande. Las tiendas de disfraces tienen que competir unas con otras para ofrecer no solo los mejores precios, sino también la más original de las temáticas. Desde Carnaval y Mucho Más nos han indicado que ofrecer un producto original es clave en la sociedad en la que nos movemos precisamente porque las redes sociales lo condicionan todo. Pero también es verdad que, gracias a esas redes sociales, la cantidad de gente que ahora se disfraza cuando llega Halloween o Carnaval ha crecido de un modo tremendo.
La verdad es que el objetivo que se persigue con todo esto, que no es otro que el de hacer posible que la gente lo pase bien, se consigue sin demasiadas dificultades. Las personas, por lo general, siempre estamos dispuestas a pasarlo bien y a realizar planes que favorezcan eso. Cuando llega el mes de febrero o marzo y el 31 de octubre, la felicidad se dispara en España y en otros muchos lugares de todo el mundo.
Tanto le gusta a la gente disfrazarse que los hay que incluso aprovechan cualquier excusa para hacerlo. Es el caso de quienes celebran disfrazándose un cumpleaños, algo que cada día hace más gente y que ya podríamos considerar habitual en los tiempos en los que nos movemos. Y la realidad es que no es para menos. Hay que sacar el máximo rédito posible de cada instante de esta vida y la verdad es que disfrazarse es una de las mejores maneras de conseguirlo.
